En España, el gasto en alimentos saludables ha crecido un 29.2% en los últimos cinco años, superando al de los alimentos no saludables. Este cambio destaca una creciente preocupación por mantener una dieta equilibrada y consciente.
¿Qué está impulsando este cambio?
Mayor consumo de carne
El consumo de carne ha experimentado un aumento notable del 22%, destacándose la carne de cerdo, que ha crecido un 34%. Este incremento refleja un interés por incorporar proteínas de origen animal dentro de una dieta saludable.
Galicia como referente
Galicia lidera la tendencia con un aumento del 37.5% en el gasto en alimentos saludables, seguida de cerca por Navarra y el País Vasco. Estas regiones han demostrado ser pioneras en la adopción de hábitos alimenticios más equilibrados.
Contrastes regionales
Mientras que el norte avanza, el sur de España, particularmente en Andalucía, Extremadura y Murcia, muestra un menor consumo de alimentos saludables, revelando diferencias significativas en los patrones de alimentación a nivel regional.
Los desafíos por superar
Persistencia de alimentos no saludables
Aunque su consumo ha disminuido ligeramente, el gasto en alimentos no saludables ha aumentado un 17%. Esto pone de manifiesto que, a pesar de los avances, aún hay mucho camino por recorrer para consolidar un cambio hacia hábitos alimenticios más beneficiosos.
Factores sociales y culturales
Edgar Sánchez, experto en comportamiento del consumidor, subraya la importancia de identificar y abordar las barreras que dificultan la adopción de hábitos saludables. Aspectos como la accesibilidad económica, las tradiciones culturales y la educación alimentaria juegan un papel crucial en este proceso.
Lecciones clave y perspectivas
Promoción de la diversidad alimentaria
Es esencial fomentar una dieta diversificada y sostenible que contemple no solo los beneficios nutricionales, sino también las implicaciones económicas, culturales y ambientales. Esto permitirá un enfoque más integral y accesible para todos los sectores de la población.
Adaptación a las diferencias regionales
Las estrategias para incentivar hábitos más saludables deben ser sensibles a las particularidades de cada región, adaptándose a las preferencias alimenticias locales y asegurando el acceso equitativo a alimentos saludables en todo el país.
El crecimiento del gasto en alimentos saludables en España refleja un cambio positivo, pero también resalta los desafíos pendientes. Con un enfoque adecuado, estas tendencias podrían consolidarse, marcando un paso importante hacia un estilo de vida más equilibrado y consciente en toda la población.